Dan O'Bannon es mejor conocido como el escritor detrás de títulos como: Dark Star, Alien, Dead & Buried, Total Recall, etc. Sin embargo en 1985 sorprendió a todos con un acercamiento distinto al genero Zombie, entregándonos la que quizá es la mejor película de Zombies de la década de los ochentas: "The Return of the Living Dead".
Irónica y repleta de escenas memorables, como la ya clásica escena de un zombie pidiendo por radio que envíen más paramédicos a la zona para poder devorarlos; nos entrega una película de terror distinta para los estándares de la época, dominada por los super serial killers: Jason, Micheal Mayers y Freddy Krueger.
La historia de manera muy inteligente se sitúa como una secuela a "Night of the Living" Dead de Romero pero a su vez no tiene mayor relación con está película, solamente que ambas películas cuentan con zombies como protagonistas. Frank y Freddy son dos trabajadores de un almacén de productos químicos y médicos que guarda en el sótano un grupo de barriles que por error el ejercito envió al almacén y nunca reclamaron. Dentro de estos barriles están almacenados los cuerpos de los zombies capturados luego del incidente que sirvió de inspiración para realizar la película de Romero (esta es la única conexión entre ambas cintas y O'Bannon deja bien claro que lo que se ve en la cinta de Romero es una adaptación libre de lo que realmente sucedió, dejando el espacio necesario para poder jugar libremente con sus zombies). El resto de la historia es bastante obvia y directa, accidentalmente liberan el contenido de uno de estos barriles desatando una serie de situaciones que terminan por hacer que los muertos del cementerio aledaño cobren vida.
El resultado final es una película sumamente divertida, con mucha sangre y víceras desparramadas y con un final que cierra muy bien este capítulo de la saga Zombie.
Puntaje: 9/10
La historia de manera muy inteligente se sitúa como una secuela a "Night of the Living" Dead de Romero pero a su vez no tiene mayor relación con está película, solamente que ambas películas cuentan con zombies como protagonistas. Frank y Freddy son dos trabajadores de un almacén de productos químicos y médicos que guarda en el sótano un grupo de barriles que por error el ejercito envió al almacén y nunca reclamaron. Dentro de estos barriles están almacenados los cuerpos de los zombies capturados luego del incidente que sirvió de inspiración para realizar la película de Romero (esta es la única conexión entre ambas cintas y O'Bannon deja bien claro que lo que se ve en la cinta de Romero es una adaptación libre de lo que realmente sucedió, dejando el espacio necesario para poder jugar libremente con sus zombies). El resto de la historia es bastante obvia y directa, accidentalmente liberan el contenido de uno de estos barriles desatando una serie de situaciones que terminan por hacer que los muertos del cementerio aledaño cobren vida.
El resultado final es una película sumamente divertida, con mucha sangre y víceras desparramadas y con un final que cierra muy bien este capítulo de la saga Zombie.
Puntaje: 9/10
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