miércoles, 3 de agosto de 2011

Limitless (Sin Limites - 2011) - Neil Burger

Este thriller de ciencia ficción se centra en la vida de Eddie Morra (Bradley Cooper), un aspirante a escritor, al que una casualidad le presenta la oportunidad de consumir una nueva droga experimental que dispara todos los sensores del cerebro haciendo que uses el 100% del potencial que este tiene (la comunidad científica afirma que un humano promedio sólo usa entre el 15% y el 20% de la capacidad de su cerebro durante toda su vida). El resultado, nos deja frente a un hombre seductor (en todo el sentido de la palabra) que es capaz de lograr cualquier cosa que se propone gracias a este estado iluminado. Pero el efecto esta limitado a poco más de un día de duración, después del cual las funciones del individuo se ven disminuidas hasta el punto que podría (y de hecho lo hace) llegar a matar al sujeto. Sin embargo, si continua su consumo periódico él consumidor no tendría (aparentemente) ningún efecto colateral.

En el camino Eddie es perseguido por un hombre misterioso que está dispuesto a hacer cualquier cosa por adueñarse del stock de pastillas que él tiene,  es chantajeado por un grupo de narcotraficantes que quiere tener el control sobre esta nueva droga y participa en la mayor transacción financiera de la historia. Al final todo sale bien para Eddie, consigue su suministro ilimitado de pastillas y se perfila como uno de los hombres más exitosos de Nueva York, derrota a los traficantes y se libra de su perseguidor.

La cinta mezcla bastante bien la acción con el desarrollo de la historia de éxito de Morra gracias al uso de esta pastilla "mágica" llamada NZT; sin embargo, la cinta no es más que un viaje alucinante y divertido. En algún momento uno puede querer hacer un paralelo con un crítica social hacia las grandes farmaceuticas o una apología al consumo de drogas, pero después de ver el resultado final, creo que nunca fue está la intención de Burger y, más bien, lo que busca es solamente entretener a su público.

Cooper por momentos nos entrega una muy buena actuación, pero por otros no termina de dejar detrás el papel de Phil (Hangover), sus muecas y gestos nos recuerdan más la comedia del 2009/2011 que una situación dramática. Robert De Niro, como el magnate Carl Von Loon (me suena a villano de tira cómica), nos entrega una de sus mejores actuaciones en los últimos años.

No llega a ser el éxito del verano ni la "Matrix" moderna sin dejar de ser entretenida y presentar una propuesta novedosa.

Puntaje: 7/10


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